Vivimos en una era en que ser un millennial empieza a ser sinónimo de adulto. Una época en que las tendencias duran menos que tú cuando descargas vídeos de forma ilegal de YouTube. Las eras han cambiado y estamos en el lapso tecnológico al que yo llamaría un “nudo”. Muchas veces divago en cómo será todo y en dónde estaré cuando este nudo se desamarre. Cuando esto suceda veremos cosas mucho más grandiosas que las que podemos ver actualmente. Con este preámbulo quiero preparar tu mente para pasar al tema que nos atañe: el futuro de las criptomonedas.
Anoche sostenía una conversación con un amigo en el grupo de WhatsApp de SoyGeek, lo cual, cómo es obvio me movió a escribir esto. Muchos ven como una gran inversión usar su dinero para comprar monedas electrónicas. Así mismo un gran número de personas están moviendo su dinero para adquirir tarjetas de vídeo para hacer centros de minado. Se están invirtiendo grandes cantidades de dinero entorno a las criptomonedas.
Pero así como muchos ven esto como un buen negocio a largo plazo, hay quienes creen que, cómo burbuja, no tardará en explotar. La verdad es que hay sólidas razones para creer en este futuro catastrófico para las criptomonedas. Pero como lógica aplastante puedo argumentar que lo mismo se pensaba de la tarjeta plástica, de PayPal,… Es cierto que tuvieron altibajos y de alguna forma tuvieron que ser ajustados para que no perjudicaran la economía mundial. Pero hoy por hoy, las transferencias electrónicas y el dinero virtual son el tipo de cambio elegido por muchos.
El día de hoy muchos países buscan migrar su riqueza nacional al mundo de las criptomonedas. Japón es uno de los que tienen en mira hacer este salto en poco tiempo. Esto al ver que muchas naciones Europeas han sacado a flote la economía nacional.
¿Qué es lo que opino personalmente?
Mucha gente se ha declarado “anti-efectivo”, hay más que prefieren usar métodos de pago electrónicos. Aunque esto dispara en una proporción enorme la falta de control del dinero. Pero esto es algo que no se va a detener, irá en crecimiento. Es claro que las economías globales están valiéndose de las ventajas de este tipo de moneda para hacer negocios. El mundo de las finanzas ya no volverá hacer lo mismo, esto que empezó como un medio libre de mover recursos hoy es una realidad.
La comodidad, seguridad y privacidad que maneja el mundo de las monedas electrónicas está atrayendo a muchos inversionistas. Esto no solo porque haya quienes manejen negocios turbios, sino porque hay personas honestas que prefieren manejar su riqueza de forma anónima y segura.
Obviamente habrá ciber-inseguridad, pero como todo se requerirá de ciber-policías que resguarden nuestras inversiones. Estamos a un paso de hacer viajes a Marte, no debería sorprendernos tener un tipo de moneda como los son las criptomonedas.
